Por: Abel Álvarez
Tenía apenas 14 años cuando se estrenó y quién me iba a decir que 20 años después participaría en la celebración de este aniversario en La Habana. “La Bella…” siempre ha sido de esas películas agradecidas por todos los que conocieron el teatro musical y los que lo descubrimos con ella.
De México a Cuba y viceversa, iban y venían los correos cómplices entre Pineda Barnet y Carlos Barba quienes organizaban lo que sucedería los días 28 y 29 cerca de la esquina 23 y 12. Textos que fueron seleccionados para un dossier que dejará registrado para la memoria algunos de los artículos escritos sobre un Alhambra que no lograron derrumbar.
Quedaría recogido en el DVD-homenaje, producido por el ICAIC, además del filme, el documental de Barba devenido en making off, que nos reveló los sinsabores y alegrías que sufrieron todos los involucrados en el mejor filme musical de la Isla. ¡Cuánto descubrimiento en cada testimonio seleccionado para conformar “Canción para Rachel”!, un espaldarazo a la negación que no pudo amilanar la fuerza de un proyecto que de por sí venía destinado a triunfar, a pesar de las carencias de recursos obvias e impuestas.
Este diciembre de 2009 Enrique Pineda Barnet pudo aglutinar a muchos que, en aquellos años, le ayudaron a llevar a feliz término “La Bella del Alhambra. Emoción, historias por contar, sentimientos encontrados y un público ávido de saber dónde estaban aquellos que a finales de los 80 hicieron vibrar a un país que por fin sentía que se le hizo justicia a su música en el cine.
Beatriz Valdés y Abel Álvarez en cine Chaplin, La Habana, Cuba |
De México a Cuba y viceversa, iban y venían los correos cómplices entre Pineda Barnet y Carlos Barba quienes organizaban lo que sucedería los días 28 y 29 cerca de la esquina 23 y 12. Textos que fueron seleccionados para un dossier que dejará registrado para la memoria algunos de los artículos escritos sobre un Alhambra que no lograron derrumbar.
Quedaría recogido en el DVD-homenaje, producido por el ICAIC, además del filme, el documental de Barba devenido en making off, que nos reveló los sinsabores y alegrías que sufrieron todos los involucrados en el mejor filme musical de la Isla. ¡Cuánto descubrimiento en cada testimonio seleccionado para conformar “Canción para Rachel”!, un espaldarazo a la negación que no pudo amilanar la fuerza de un proyecto que de por sí venía destinado a triunfar, a pesar de las carencias de recursos obvias e impuestas.
Este diciembre de 2009 Enrique Pineda Barnet pudo aglutinar a muchos que, en aquellos años, le ayudaron a llevar a feliz término “La Bella del Alhambra. Emoción, historias por contar, sentimientos encontrados y un público ávido de saber dónde estaban aquellos que a finales de los 80 hicieron vibrar a un país que por fin sentía que se le hizo justicia a su música en el cine.